Fuente de catro caños y pilón en el centro.
Siglo XVI.En tiempos de santa Teresa.
Teresa había observado que el huerto, contiguo a la casa paterna, daba flores y verduras cuando se regaba. Y, si no había agua, se secaba. Se fijó en otro detalle. Unas veces, su padre lo regala, echando al pozo un cubo atado a una soga, del que tiraba a peso y luego vaciaba en los surcos. Otras veces la sacaba con una noria, y por un canal llegaba el agua a los surcos. Otras, conduciendo el agua desde un arroyo cercano. Y, otras el huerto se regalaba con la lluvia.
Ahora, pues, aplicadas estas cuatro maneras de agua con que se ha de sustentar este huerto, porque sin ella se perdería. es lo que a mí me hace al caso. Y me ha parecido que se podrá declarar algo de cuatro grados de oración, en que el Señor por su bondad ha puesto algunas veces mi alma. Pido a su bondad atine a decirlo.
Siglo XVI.En tiempos de santa Teresa.
Teresa había observado que el huerto, contiguo a la casa paterna, daba flores y verduras cuando se regaba. Y, si no había agua, se secaba. Se fijó en otro detalle. Unas veces, su padre lo regala, echando al pozo un cubo atado a una soga, del que tiraba a peso y luego vaciaba en los surcos. Otras veces la sacaba con una noria, y por un canal llegaba el agua a los surcos. Otras, conduciendo el agua desde un arroyo cercano. Y, otras el huerto se regalaba con la lluvia.
Cuando a ella le tocó regar el huerto, supo que había diferencia en regar el huerto de una manera a otra. La primera le suponía un esfuerzo grande y de poco provecho. Con la noria, se hacía menos fuerza y se sacaba más agua. Desviando el agua del arroyo hasta la huerta, el esfuerzo era mínimo y los surcos se empapaban hasta rebosar. Cuando llovía, el agua refrescaba las hojas y los tallos, y llegaba mansamente hasta las raices,sin ningún esfuerzo.
Y se dijo a sí misma: esto mismo es lo que me ha ocurrido cuando me he propuesto cultivar en mi interior las flores de virtudes y recrear mi alma como prado de verduras. Y también esto me ha ocurrido haciendo oración, unas veces de una manera y otras de otra, La escuchamos:
Ahora, pues, aplicadas estas cuatro maneras de agua con que se ha de sustentar este huerto, porque sin ella se perdería. es lo que a mí me hace al caso. Y me ha parecido que se podrá declarar algo de cuatro grados de oración, en que el Señor por su bondad ha puesto algunas veces mi alma. Pido a su bondad atine a decirlo.
Teresa es feliz ofreciendo su alma a Dios como huerto, que necesita agua divina. ¡Cómo cambió su vida cuando descubrió este agua de la oración! ¿Cómo la fue llevando a su huerto?
Lo iremos viendo en dias sucesivos.
Cuan valiosa es esta reflexión!!
ResponderEliminarLa guardaré en mi corazón, para prestar mas atención en mi huerta interior, y hacer la tarea diaria con mas entusiasmo y dedicación.
Un abrazo.
Gracias, Edit. Me emocionan tus comentarios, porque sacas conclusiones para ser un poco mejor cada día. Santa Teresa llega hasta Argentina, porque su mensaje es universal- Con un cordial saludo desde Ávila de vuestro afmo. amigo Nicolás González
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