El
proceso en la composición del libro de Las Moradas (8)
En
el libro se destacan cuatro símbolos mayores: el castillo, las dos fuentes, el
gusano de seda y el símbolo nupcial. Podríamos calificarlos en este mismo
orden: un símbolo antropológico, el castillo; un símbolo tomado de la
naturaleza, el de las fuentes; de matiz biológico, el del gusano de seda:
sociológico, el símbolo nupcial.De los símbolos se sirve para aclarar su
doctrina.
Se
centra en el símbolo base, el castillo (castillo guerrero, o joyel de
orfebrería); sirve para plantear la obra; sobre él reposa la versión que la
Autora da del misterio de la vida espiritual. Misterio profundamente humano,
con extraña correspondencia en el trazado ontológico del alma. Las siete
moradas son siete fases del proceso espiritual; pero a la vez corresponden a
siete estratos del espíritu. Grado de gracia, y nivel de vida se reclaman. La
morada primera presenta una vida espiritual estrechamente ligada al cuerpo y a
la sensibilidad. La morada última la describe unificada y en estrecha
conjunción con el centro del alma, abertura del espíritu a lo trascendente. El
que entra, por la puerta de la oración, en las primeras moradas del castillo,
deja fuera las distracciones y rutinas de la vida.Y empieza a pensar en sí
mismo, en el conocimiento propio.
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