martes, 30 de marzo de 2010

VIDA DE SANTA TERESA,CENTRADA EN CRISTO I



Jesucristo en oración en el Huerto.
Pintura sobre tabla.Pedro Berruguete,1503
Retablo Mayor de la Catedral de Ávila


VIDA CENTRADA EN CRISTO. I.
Esta semana de Pasión la dedicamos a honrar a Jesús de Teresa.
Varias veces se le representaba en persona. Afortunadamente, conocemos el trato mutuo de Jesucristo con Teresa y de Teresa con Jesucristo. Porque lo dejó por escrito en su “diario”, o libros que escribió.
Empecemos por una visión que tuvo en los primeros años de monja: “ Representóseme Cristo delante, con mucho rigor, dándome a entender lo que de aquello (algo que le estaba sucediendo) le pesaba. Le vi con los ojos del alma más claramente que le pudiera ver con los del cuerpo, y me quedó tan impreso que, hace esto más de ventiseis años, y me parece lo tengo presente” (Vida 7,6).

Para santa Teresa , como para todo cristiano, Jesús es el centro orbital de su vida nueva, de su pensamiento y de su magisterio espiritual. Ella se encontró con el Cristo muy llagado, con la cruz a cuestas, y también con el Resucitado, y éste le cambió la vida y le confirió una misión que cumplir, de transcendencia inmensa en la iglesia y en la cultura universal.
Su primera experiencia religiosa fue el sentirse amada por El, y, a la vez, el gozo de corresponderle con amor de esposa. Verse amada por Dios, libremente amada por el Dios soberano, ella , una criatura insignificante, una pobre mujer cualquiera, escogida, preferida, agasajada con visiones y revelaciones misteriosas, de las que no podía dudar, que le daban una certidumbre mayor que la del sol o la del aire en la alameda.
El conocimiento de Jesucristo lo fue aprendiendo, primero, de la boca de su madre. Luego la impactó la lectura personal de los Evangelios y la escucha de la Palabra de Dios en la Misa y el Oficio Divino. Lo fue interiorizando y se lo fue apropiando en la meditación y contemplación.
Ella experimentó, paso a paso, lo que Jesús era para ella : luz, hermosura, camino, amigo verdadero, esposo adorado, padre misericordioso, rey y señor, Dios santo.Y oía decirle al oído del alma: ¡Teresa, soy yo, no temas!.¡No tengas fatiga!.- “Solas estas palabras, comentaba Teresa, bastaban para quitármela y quitarmela del todo. Sus palabras son obras. Heme aquí, con solas estas palabras, sosegada, con fortaleza, con ánimo, con seguridad, con una quietud y luz, que en un punto vi alma hecha otra, y me parece que con todo el mundo disputara que era Dios.
Amigos del Blog, pido para vosotros que ,mirando a Jesucristo, con fe y amor, en esta semana santa, os conceda experimentar esos mismos efectos en vuestra alma: sosiego, fortaleza, ánimo, seguridad, quietud y mucha, mucha luz. Os encomiendo en este Monasterio de la Encarnación, la casa grande y deleitosa de nuestra patrona santa Teresa, vuestro Capellán-

domingo, 28 de marzo de 2010

EL DOMINGO DE RAMOS, PARA SANTA TERESA

Un feligrés, con una palma en la mano,
contemporaneo de santa Teresa.
Bajo relieve en plata, Juan de Arfe, 1571 .Custodia del Corpus.
EL DOMINGO DE RAMOS, PARA SANTA TERESA
Santa Teresa, el Domingo de Ramos, se privaba de comer y le enviaba su comida a un pobre, con lo quería significar que le daba de comer a Jesucristo ese día, para compensarle de que no se le hubiera ocurrido a nadie haberle invitado ese día, después de tan solemne recibimiento-
A su vez, Jesucristo le premió ese gesto con un regalo indecible. Fue el siguiente. All comulgar, ese día tuvo la sensación de que, se le llenaba la boca de sangre caliente, que le brotaba al Señor de sus llagas.
Lo relata de la siguiente manera:

El día de Ramos, acabando de comulgar, quedé con gran suspensión, de manera que aún no podía pasar la Forma, y teniéndomela en la boca, verdaderamente me pareció, cuando torné un poco de mí, que toda la boca se me había henchido de sangre; y parecíame estar también el rostro y toda yo cubierta de ella, como que entonces acababa de derramarla el Señor.

Me parece estaba caliente, y era excesiva la suavidad que entonces tenía, y me dijo el Señor: “Hija, yo quiero que mi sangre te aproveche y no hayas miedo que te falte mi misericordia. Yo lo derramé con muchos dolores, y tu lo gozas con tan gran deleite, como ves- Bien te pago el convite que me hacías este día”.

Esto dijo porque hace más de treinta años que yo comulgaba este día, si podía, y procuraba aparejar mi alma para hospedar al Señor, porque me pacería mucha la crueldad que hicieron los judíos, después de tan gran recibimiento, dejarle ir a comer tan lejos, y hacía yo cuenta de que se quedase conmigo,aunque en harto mala posada, según ahora veo.

Tal día como hoy, a las cinco de la mañna, hora solar, miércoles, en Ávila, el 28 de marzo de 1515 nació Teresa de Ahumada, nuestra Santa Teresa de Jesús. ¡Feliz cumpleaños!

viernes, 26 de marzo de 2010

EL EVANGELIO, SEGÚN SANTA TERESA, XIII

Apostol san Juan, con el caliz en la mano.
Nos recuerda la última cena, en la que Jesucristo les dió a beber
del caliz, en ofrenda de la sangre que iba a derramar en testimonio
de su amor total. Eucaristía de la que hacemos memoria el Juves Santo.


JESUCRISTO, REY NUESTRO

Ahora santa Teresa llama Rey a Jesucristo. Y hace una distinción muy aguda para distinguir la majestad de este Rey de la de otros en la tierra. Los reyes, si dicen por sí mismos que son reyes, no se lo cree nadie, pues un rey ,a secas, es uno como nosotros. Por eso se hace acompañar de dignidades y de escolta, para que quienes lo vean, crean que es rey. Y en cualquier caso, su reinado es temporal, frágil como “palillos”. La escuchamos:


¡Oh, Rey de la gloria y Señor de todos los reyes!

¡Cómo no es vuestro reino armado de palillos, pues no tiene fin!

¡Con mirar vuestra persona, se ve luego que sois sólo el que mereceis que os llamen Señor. Según la majestad que mostrais, no es menester gente de acompañamiento ni de guarda, para que conozcan que sois Rey.

Porque acá, un rey se conocerá mal por sí sólo, aunque el quiera mucho ser conocido por rey. No le creerán, pues no tiene más que los otros; es menester que se vea por qué lo han de creer.

Y por eso es razón que tenga estas autoridades postizas, porque si nos las tuviera, no le tendrían en nada. Porque no sale de sí el parecer poderoso, por eso le ha de venir la autoridad de otros.

¡Oh, Señor mio; oh Rey mío!, ¡quien supiera ahora representar la majestad que teneis! Es imposible dejar de ver que sois gran Emperador en Vos mismo; pues espanta mirar esta majestad ( Vida, 37,6)

Y una noticia de Santa Teresa conocida en todo el mundo. En el número de hoy de la revista Ecclesia vine la noticia y la foto de una reciente iglesia parroquial, construida en Kotërr (Albania). El sacerdote, de la diócesis de Sevilla, Andrés Rodríguez González conoció la necesidad y el interés de esa población, y se encargó de recaudar fondos en España hasta conseguir la totalidad que requería el proyecto de esa iglesia. Se lo envió al párroco don Kastrioti y levantó su nueva iglesia con su hermosa torre campanario . Por deseo del obispo de esa diócesis albanesa monseñor Luciano, la iglesia ha sido dedicada a santa Teresa de Jesús.


Esta semana santa de 2010, por primera vez, Cristo Rey podrá ser honrado y celebrado en ese bellísimo pueblo del valle de la Zadrima. A ellos les dedicamos estos textos de su santa Patrona. Y si nos visita alguien que conozca a don Andrés Rodríguez González, que le diga que nos hemos hecho eco de su emocionante aventura, y que le agradeceríamos ampliarla en nuestro BLOG.